LA
POESÍA COMO ACTIVIDAD ESCOLAR
Dentro de la educación la poesía
posee un papel fundamental, ya que ayuda a despertar el interés y la motivación
de nuestro alumnado, haciéndolo más independiente intelectualmente. A través de
la poesía fomentamos las dimensiones comunicativas, lingüísticas, lúdicas,
culturales y sociales, siendo todas ellas fundamentales para conseguir y
desarrollar el desarrollo integral del alumnado.
La poesía constituye una de las
formas más artísticas, puras y bellas del lenguaje. A pesar de ello, la escuela
ha olvidado en gran medida su alto valor educativo. En muchas de nuestras
escuelas la poesía sólo funciona ocasionalmente con motivo de las fiestas
escolares u ocasiones especiales. Los actos culturales en los cuales algunos
niños dicen y hace las cosas, están muy lejos de cumplir su labor formativa y
socializadora que tanto preconiza la escuela
nueva.
VISITA PEDAGÓGICA A LA BIBLIOTECA REGIONAL
El Séptimo Año B de la Escuela "Los Estandartes" fue invitado al Programa Poesía Viva, organizado por la Sociedad de los Poetas de Atacama en la Biblioteca Regional.
Este curso fue acompañado por la profesora de Lenguaje, Srta. Sofía Ramírez Beroiza y el profesor encargado de Convivencia Escolar de nuestro establecimiento, el Sr. Antonio Urbina. Los estudiantes pudieron disfrutar de la belleza de la poesía con la intervención de varios poetas regionales. Al conversar con los estudiantes que asistieron al evento, manifestaron que la experiencia adquirida les dejaba plenamente satisfechos ya que ampliaba sus panoramas sobre lo que conocían sobre el Género Lírico y que esperaban nuevamente ser invitados para otra actividad como esta.
El docente Antonio Urbina por su parte manifestó que estaba muy satisfecho por el comportamiento de los estudiantes y que agradecía la buena disposición de los organizadores por darle una oportunidad tan valiosa a los estudiantes de conocer la poesía desde la perspectiva de grandes exponentes de este arte.Asimismo agradeció al Sr. Eduardo Aramburú quien entregó parte de su valioso tiempo para atender a los estudiantes.
La Docente Sofía Ramírez Beroiza, expresó: "Para mi, como profesora, es primordial que mis estudiantes reciban de primeras fuentes este bálsamo de poesía de parte de personas que aman y expresan sus sentimientos hacia la naturaleza y al amor hacia este arte".
El docente Antonio Urbina por su parte manifestó que estaba muy satisfecho por el comportamiento de los estudiantes y que agradecía la buena disposición de los organizadores por darle una oportunidad tan valiosa a los estudiantes de conocer la poesía desde la perspectiva de grandes exponentes de este arte.Asimismo agradeció al Sr. Eduardo Aramburú quien entregó parte de su valioso tiempo para atender a los estudiantes.
La Docente Sofía Ramírez Beroiza, expresó: "Para mi, como profesora, es primordial que mis estudiantes reciban de primeras fuentes este bálsamo de poesía de parte de personas que aman y expresan sus sentimientos hacia la naturaleza y al amor hacia este arte".
Objetivos
a lograr con la enseñanza de la poesía:
Entre los objetivos que podemos conseguir con la enseñanza de la poesía tenemos:
-Fomentar el interés por descubrir la belleza y el mensaje que todo buen poema encierra, desarrollando el gusto por la literatura a través de los autores y las obras más representativas.
- Fomentar
el interés por descubrir la belleza y el mensaje que todo buen poema encierra,
desarrollando el gusto por la literatura a través de los autores y las obras
más representativas.
- Atender
a las diferencias individuales de los alumnos y descubrir en ellos posibles
aptitudes poéticas.
- Introducirlos
en el conocimiento de los valores poéticos con que cuenta el habla hispana.
- Desarrollar
la memoria y la imaginación.
- Cultivar
el gusto por las cosas bellas.
-
Alcanzar mayor dominio
en la articulación, entonación y pronunciación de las palabras, a la vez que se
pule y se enriquece el lenguaje de los alumnos.
A través de la poesía, lo mismo
que a través de las demás actividades generales del lenguaje oral, se pueden
lograr los objetivos generales que hemos planteado para este sector.
Beneficios de la poesía.
Como bien hemos dicho, gracias al trabajo con la poesía podemos desarrollar grandes beneficios en nuestros alumnos, como veremos a continuación:
- La
poesía nos ayuda a ampliar las situaciones y posibilidades comunicativas. Con
la poesía se lleva a cabo una comunicación doble y cruzada entre autor y
receptor distinta a la ordinaria. El acto de habla que genera la poesía se
puede repetir tantas veces como se desee, pudiéndose disfrutar en todo el mundo
y en diferentes momentos.- La
poesía nos permite imaginar realidades diferentes de aquellas a las que estamos
acostumbrados a vivir. Para que pueda darse la comunicación poética, es preciso
que el lector acepte entrar dentro de esta realidad imaginaria, sin saber ni
cuestionarse el realismo real de la propia poesía.
De este modo, la lectura
se convierte en una actividad que se desarrolla en un mundo que puede estar
poblado de todo cuanto existe, pues en el mundo de la imaginación todo está permitido.
- La
poesía enriquece nuestra capacidad de uso del lenguaje. Ya que es un género de
discurso libre, en cuanto al uso del lenguaje, y muy distinto al de nuestra
vida cotidiana. Gracias a la lectura podemos enriquecer nuestro vocabulario y
relacionarnos con un uso del lenguaje más culto.
- La
poesía nos permite acceder a una forma de conocimiento diferente. La poesía
proporciona una forma de conocimiento que no surge de una comprensión
intelectual de la realidad, sino del sentimiento de estar implicado en ella. A
través de la poesía el autor abre un abanico de sentimientos que plasma en cada
verso del poema, sus emociones, sus miedos, alegrías, confesiones, pasión, duda…,
y es algo que sólo el poeta transmite por haberlo experimentado por sí mismo.
- Tanto es
así, que amplia nuestra conciencia, afirma nuestra sensibilidad y renueva
nuestra comprensión del mundo. Podría decirse, que la lectura de poemas implica al lector en la realidad
imaginaria para que intencionadamente, construya su sentido y se contagie de la
sensibilidad que el poeta desea comunicar, ascendiendo de este modo, a una
manera de conocer diferente de aquella que estamos acostumbrados.
- La
poesía nos abre a la experiencia estética. La poesía es entendida como una
experiencia gratificante, vinculada a la belleza del lenguaje que tiene como
fundamento la construcción del sentido. Se trata, por consiguiente, del sentido
estético que surge de la implicación del lector en el lado sensible de la
realidad representada. Esta experiencia es el resultado de un proceso activo y
dinámico llevado a cabo por el lector, cuando intenta descubrir la sensibilidad
y el sentimiento del poeta. Llegando a tomar conciencia del efecto sensibilizador
y emotivo, que él mismo recibe en el acto de comunicación poética.
- La
lectura de poemas del pasado accesibles a los alumnos, es una ocasión para
poder observar a través del tiempo.- Nos
permite comprobar cómo la gente experimenta el mundo en distintas épocas de
manera diferente, y cómo la sensibilidad de las personas y de los pueblos
cambia de unos tiempos a otros.
- El uso
de la escritura siempre supone profundizar en las características del tipo de
texto que se escribe. De ahí, que los profesores deban motivar la escritura
poética de sus alumnos como forma de exploración y de conocimiento de este
género de discurso, aunque su objetivo principal no sea la formación de poetas.
Gracias a esto podemos llevar a
cabo unos principios metodológicos en nuestro aula, como puede ser crear
ambientes y situaciones de lectura de poemas acondicionando el aula para un
ambiente de lectura idónea, llevar a cabo la lectura de poemas por parte del
maestro/a con el ritmo y la entonación adecuadas, apoyar la lectura con imágenes de la misma, tras su
lectura realizar preguntas y debates sobre dicho poema, fomentar la lectura de
poemas por parte de los alumnos; leer, escuchar o recitar varias veces el mismo
poema…
La tarea educativa ha de
consistir en proporcionarles a los alumnos la ayuda necesaria para que cada uno
descubra el sentido del poema que ha leído. Como bien sabemos, hemos de
recordar que cuando el alumnado se está iniciando en el género lírico, es
difícil que puedan acceder por sí solos al sentido de un poema mediante una
lectura silenciosa del mismo; de ahí que sea preciso ayudarles a buscar ese
sentido. Es por
ello, el uso de estrategias colectivas de lectura de poemas que faciliten el
gusto de lo lírico.
Orientaciones didácticas para los maestros.
Al enseñar la poesía, los maestros deben tener muy en cuenta los siguientes aspectos:
- Muchas veces las poesías atraen a los alumnos más por su rima que por su contenido, como se puede ver en el siguiente ejemplo:
Los sapos en la laguna
huyen de la tempestad,
los chiquillos dicen tunga,
y los grandes tungarán;
sapitos que tunga tunga,
sapitos que tungarán.
- La poesía debe comenzar a enseñarse en la escuela desde el primer curso de primaria, comenzando ya a iniciarse y a dar las primeras pinceladas desde la educación infantil.
No se trata por supuesto, de hacer un poeta o un recitador de cada niño; sin embargo, los maestros despiertos pronto descubrirán el “alma de poeta” que hay en algunos de sus alumnos. Lo que realmente importa es que todos los niños se inicien en la tarea de apreciar la belleza, el rimo y el sentimiento que encierra todo buen poema.
Un error que se comete frecuentemente, consiste en exigir que todos los niños aprendan de memoria una determinada poesía. El error se agrava si se les obliga a que la reciten en público. Los alumnos no deben memorizar una poesía, sino cuando espontáneamente sientan el deseo de hacerlo. La recitación en público exige ciertas habilidades que algunos adquieren con mucha lentitud y dificultad.
Si se les obliga a recitar cuando no estén preparados, se corre el riesgo de ponerlos en ridículo, con los consiguientes perjuicios que ello supone.
En muchas ocasiones los niños y jóvenes oyen la lectura de un poema con gran placer. El maestro/a inexperto supone entonces, que por ello ya están preparados de comentar un poema con cierta profundidad. La verdad, es que el placer que experimentan al oír una poesía se traduce por lo general, en un goce interior que no siempre se puede expresar con palabras.
Con la poesía sucede lo mismo que con una buena música. Lo interesante es que los alumnos se acostumbren a oírla. Ya llegará el momento en que profundicen su iinterpretación. Este proceso comenzará en los últimos cursos de la escuela primaria. La enseñanza-aprendizaje de la poesía exige pues, cuidadosos procesos de selección y planificación.
Vamos a la huerta
del torontorontil,
a ver a Doñana
cortando el perejil.
Todos los niños cantan y bailan, aunque ignoren el significado de la huerta, torontoronjil y perejil, lo cual equivale a ignorar todo el contenido. ¿Por qué, entonces, la cantan? La cantan porque la rima y el ritmo de sus versos los embelesa.
La aparente monotonía de algunas poesías, debe sonar a los oídos de los niños con una gran dulzura como en el siguiente ejemplo:
del torontorontil,
a ver a Doñana
cortando el perejil.
Todos los niños cantan y bailan, aunque ignoren el significado de la huerta, torontoronjil y perejil, lo cual equivale a ignorar todo el contenido. ¿Por qué, entonces, la cantan? La cantan porque la rima y el ritmo de sus versos los embelesa.
La aparente monotonía de algunas poesías, debe sonar a los oídos de los niños con una gran dulzura como en el siguiente ejemplo:
Los sapos en la laguna
huyen de la tempestad,
los chiquillos dicen tunga,
y los grandes tungarán;
sapitos que tunga tunga,
sapitos que tungarán.
- La poesía debe comenzar a enseñarse en la escuela desde el primer curso de primaria, comenzando ya a iniciarse y a dar las primeras pinceladas desde la educación infantil.
No se trata por supuesto, de hacer un poeta o un recitador de cada niño; sin embargo, los maestros despiertos pronto descubrirán el “alma de poeta” que hay en algunos de sus alumnos. Lo que realmente importa es que todos los niños se inicien en la tarea de apreciar la belleza, el rimo y el sentimiento que encierra todo buen poema.
Un error que se comete frecuentemente, consiste en exigir que todos los niños aprendan de memoria una determinada poesía. El error se agrava si se les obliga a que la reciten en público. Los alumnos no deben memorizar una poesía, sino cuando espontáneamente sientan el deseo de hacerlo. La recitación en público exige ciertas habilidades que algunos adquieren con mucha lentitud y dificultad.
Si se les obliga a recitar cuando no estén preparados, se corre el riesgo de ponerlos en ridículo, con los consiguientes perjuicios que ello supone.
En muchas ocasiones los niños y jóvenes oyen la lectura de un poema con gran placer. El maestro/a inexperto supone entonces, que por ello ya están preparados de comentar un poema con cierta profundidad. La verdad, es que el placer que experimentan al oír una poesía se traduce por lo general, en un goce interior que no siempre se puede expresar con palabras.
Con la poesía sucede lo mismo que con una buena música. Lo interesante es que los alumnos se acostumbren a oírla. Ya llegará el momento en que profundicen su iinterpretación. Este proceso comenzará en los últimos cursos de la escuela primaria. La enseñanza-aprendizaje de la poesía exige pues, cuidadosos procesos de selección y planificación.
Actividades para realizar en el estudio de la poesía.
SELECCIÓN DEL MATERIAL:
Un maestro/a pone de manifiesto su verdadera capacidad cuando selecciona su material para trabajar con sus alumnos. La selección de material poético adecuado a los diferentes cursos de la escuela primaria es una tarea que requiere esfuerzo y voluntad de servicio.
En los primeros años escolares (educación infantil y primer y segundo curso de educación primaria), las poesías que se cantan y se bailan son las más apropiadas. A partir del tercer curso de primaria, los textos elegidos deben ser cada vez más complejos en atención a los intereses de los alumnos, así como su mayor capacidad para comprender y analizar un poema.
En nuestras escuelas aún no se aprovecha debidamente el valioso legado de nuestros poetas de habla hispana. Es indispensable que los maestros/as lean y seleccionen en cuadernos todas las poesías que consideran adecuadas para su curso. Así, algunos de los nombres que pueden consultar el maestro/a interesado son: Andrés Eloy Blanco, Alberto Arévalo Torralba, Blanca Graciela Arias de Caballero, Jacinto Fombana Pachano…
El maestro debe estudiar previamente la poesía.
Sabemos que los alumnos tratan de imitar a sus maestros/as. Si a ello agregamos que éstos deben ser un permanente ejemplo de buena pronunciación, cadencia y mímica, sobran los comentarios cuando afirmamos que los maestros/as deben hacer un estudio preciso de toda la poesía antes de leerla o recitarla frente a sus estudiantes.
El maestro debe
documentarse sobre la vida y obra del autor.
La elaboración
y aceptación de normas.
Tanto los oyentes como los lectores deben someterse a ciertas normas con el objeto de que la actividad literaria se desarrolle con pleno éxito. Tales normas deben ser de fácil interpretación, y aun cuando el maestro/a las sugiera, serán discutidas y aprobadas por los alumnos. De esta manera se organiza su cumplimiento. Entre otras sugerimos las siguientes:
Ø Normas para los lectores: Lee la poesía en silencio e interpreta su contenido antes de leerla o recitarla en voz alta. Cuando leas una poesía tu gesto, tu voz y toda tu actitud debe traducir los sentimientos del autor. Antes de presentarse al grupo debes realizar algunas prácticas frente al espejo, frente a tu maestro/a o frente a otras personas de confianza que te puedan ayudan a recitar mejor.
Ø Normas para el oyente: Siéntate bien y adopta una actitud de serenidad y respeto hacia quien recita o lee. Interésate por comprender el contenido de la poesía. Se tolerante con los errores y olvidos de quien lee o recita. Demuestra aprecio por la emoción ajena.
Cada vez que se vaya a estudiar una poesía en un curso, las normas, escritas en una cartulina, deben ser colocadas en un sitio visible, donde el maestro/a deberá estimular su cumplimiento. Esta mecánica con el tiempo desaparecerá, solamente se llevará a cabo cuando se hayan formado en grupos de hábitos y actitudes deseables.
·
Actividades
de Desarrollo.
Las actividades de desarrollo completan el proceso didáctico que deben seguir maestros y alumnos durante la enseñanza-aprendizaje de la poesía. En éste como en todo proceso didáctico, influye la experiencia e iniciativa del maestro/a que lo orienta. Las actividades de desarrollo que sugerimos comprenden estos pasos:1. El maestro/a escribirá en la pizarra los objetivos que se desean alcanzar.
2. Luego, el maestro/a lee de forma expresiva el material, o declama la poesía para sus alumnos.
3. Se copia la poesía en la pizarra. Lo ideal es que ya esté copiada, en cuyo caso la dejará a la vista de los alumnos.
4. Los alumnos hacen lectura silenciosa de la poesía.
5. Se interpreta el contenido aclarando vocabulario y ortografía.
6. Los alumnos copian la poesía en sus cuadernos.
7. Algunos alumnos realizan la lectura oral expresiva de la poesía.
8. Los alumnos que así lo deseen, pueden memorizar la poesía con objeto de recitarla posteriormente.
·
Actividades
de evaluación.
La evaluación debe resultar interesante, y a la vez, muy educativa. Los alumnos comentarán sobre los diversos pasos del desarrollo. Debemos permitir la autocrítica de declamaciones y lectores. Se oirán las críticas constructivas del maestro/a y de los alumnos. El maestro/a orientará la evaluación sin perder de vista los objetivos específicos que se plantearon: ¿Se lograron totalmente?, ¿parcialmente?, ¿no se lograron? En los dos últimos casos se determinarán las causas.
·
Actividades derivadas.
A partir de la evaluación es posible que surjan actividades derivadas como:- Preparar una biografía sobre el autor de la poesía.
- Transformar la poesía en prosa.
- Dramatizar la poesía, si ello es posible.
- Buscar otra poesía del mismo autor.
- Buscar otra poesía sobre el mismo asunto, pero de autor diferente.
- Memorizar la poesía.
Por último, concluimos poniendo de manifiesto una vez más la importancia de trabajar la poesía durante toda la etapa escolar. Ya que su trabajo y conocimiento proporciona a nuestro alumnado una serie de innumerables beneficios, mediante una serie de actividades y orientaciones didácticas.